jueves, 15 de octubre de 2009

Little by little

Sííí, to be honest: hace una semana que no escribo.

Y si digo la verdad, creo que voy a seguir este ritmo a partir de ahora. ¡Es tan difícil tener tiempo para estos lares!

La vida de au pair es una vida dura, aunque os creais que no. Los enanos agotan, la limpieza agota, el curso y los paseos agotan... y al final acabas empiltrándote a eso de las 9 de la noche (como mucho, claro). Por otro lado he estado un poco reticente a continuar el blog por un serio dilema: la sociabilización y el problema de plasmar datos de la vida privada a través de un canal tan sumamente público. Porque para ser sinceros, he conocido a bastante gente y lo que más me apetece es escribir mis impresiones, pero creo que no es muy buena idea empezar con ese tipo de cosas... aunque tengo que reconocer que TODAS mis first impressions han sido realmente buenas.

Tanto au pairs suecas, como suizas, como la chica de república checa, el au pair alemán extra-fashion, por supuesto mi española (que aunque viva en las afueras la pienso ver mucho, sí o sí!), y demás gente... encantadores, todos. El finde pasado me lo pase rodeada de estas personitas, y si no cuento cada detalle del fin de semana es porque I'm very lazy, pero debería: me lo pasé genial!

En cuanto a esta semana, está siendo más dura de lo que pensaba... suerte que en el curso me distraigo de tareas del hogar y enanos (les adoro, pero agotan!). Ayer tuve mi cleaning day y creo que no he limpiado más en mi vida: me pasé mañana y tarde entre aspiradora, mop, camas, sábanas, legos y demás historias. Y mira que en España me encantan los legos, pero tengo que decirlo: LOS ODIO. No soporto ver miles de piececitas minúsculas esparcidas por cada milímetro de la habitación, y por supuesto en moqueta!!! cómo se supone que se recoge eso?? Si al menos fuera parqué, podría hacer una de escoba y recogedor, pero en moqueta??? Una de agacha el lomo y prepara tus dedos para sufrir. Agh!
Por cierto, desde ahora también odio el monopoli, y todo juego que contenga piezas enanas y cientos de billetes volátiles que puedan acabar en el lugar más recóndito de la casa. Ódiolos!

Así que así me pasé el día, recogiendo legos, monopolis, risks, y toooooooooodos los miles de peluches que tienen sobre sus camas. ¿Por qué, digo yo, por qué? Son chicos, que jueguen con la play, legos y barcos, vale... pero que duerman con mínimo 20 peluches (no exagero NADA), dónde se ha visto? Es más, tendríais que verles en la puerta antes de ir al colegio, cada uno provisto de dos o tres peluches dispuestos a que les acompañen también en su jornada...eso sí, en la mochila, no vaya a ser que sus compis se los vean y piensen que son unas nenas!! La verdad es que me chocan estas cosas, pero me enternecen a partes iguales :)
Y cuando terminé de limpiar fui a buscarles, les hice la cena y les acompañé un poquito...total, que cuando quise subir a la habitación eran las 7:30 de la tarde. Con razón me he dormido esta mañana, y me he levantado sólo 10 minutos antes de llevarles al cole... chst, vaya carrera que les he metido hasta Howarts!! Pasando ya de lollipop women ni leches.

Este finde va a tocar españolada, que viene la spanish au pair a los centros de Edinbra y habrá que darlo todo (We'll burn Edinburgh!), o por lo menos intentarlo. Además mi host family se va de vacaciones, suerte que somos unos cuantos au pair en la misma situación, de solipandis por una semana... así que habrá que kill the time de alguna manera (vale sí, esta expresión es by Bii, y qué?)

Por cierto! Ayer fui al Harvest show de Fraser, ¡No puede haber niños más monos en el mundo! Look at the food that you eat! See if your diet is complete! (es la letra de la canción, más o menos claro!). Os imaginais a 30 babys cantado esto vestidos de hortalizas? Me los comería a todos! (y nunca mejor dicho!)

Ahí so dejo una prueba :)

1 comentario:

  1. Estimada señorita:
    Es mi ilusión invitarla a que siga a lo largo de estas semanas, a través de mi humilde blog (www.molestoluegoexisto.blogspot.com), el ensayo que realizó acerca de la dulce obra escrita por el genial Saint Exupery; El Principito. Esta breve creación tiene mucho de profundo. Pero no se trata de una profundidad plomiza, suprametafísica o hiperintelectual, ¡para nada! Todo lo contrario, el mensaje del principito es sencillo, directo y preclaro.
    Mi objetivo es que juntos saquemos el máximo jugo a la brillante creación del francés… sin duda esta apasionante labor nos servirá para alegrar nuestros espíritus y crecer un poquito más.
    Un animoso saludo desde la isla de Gran Canaria.

    ResponderEliminar